Pronto todo se quedó en silencio,
mientras John y tú presenciaban cómo Paul se desmoronaba, y al mismo tiempo
Andrea, escondida y callada, había escuchado todo.
Paul se levantó del sofá, pues ya era
hora de partir. Tú le prometiste que convencerías a Andrea para que fuese al
juzgado. Andrea regresó a su habitación, quedándose solos John y tú.
Tú: Ha sido un día muy difícil, ¿no
crees?
John: Claro que sí muñequita, de hecho
estoy muy cansado –decía mientras te abrazaba-
Tú: Ya vámonos a dormir
John: No hermosa, yo me voy a casa
Tú: ¡Claro que no!
John: Están tus papás, eso podría
malverse
Tú: Por dios Lennon, de cuándo acá eres
“bien portado”. Además, mis padres no son tontos, ¡hasta mamá me dijo que
durmieras aquí conmigo!
John: ¿Que tu mamá dijo qué?
Tú: Lo que escuchaste Lennon, ahora vamos
a la cama que nos espera un día pesado
John: Ok, pero no me llames “Lennon”
–haciendo un puchero-
Tú: Está bien amore, pero vamos yaaaaa!
Así ambos se enfundaron en el sueño,
mientras rogabas que todo se solucionara.
A la mañana siguiente…
Despertaste muy temprano, lo primero que
hiciste fue bajar a preparar el desayuno para todos. Después despertaste a
Andrea y la llevaste a la cocina. Comenzaron a platicar.
Tú: Andrea, te he hablado a ésta hora
porque –pero la futura madre interrumpió-
Andrea: Para ir a la audiencia, lo sé.
Tú: Pero, ¿cómo te enteraste?
Andrea: Escuché todo anoche
Tú: Andrea, ¿tienes información?
Andrea: Sí, ésa misma noche recuerdo que
me sentía mal, fui al baño, Linda me alcanzó y le pedí ayuda, la cual me negó.
Después escuché que le decía a un tal “Charles” que me desapareciera, y de ahí
sólo recuerdo haberme despertado al otro día. Pero todo estaba tan normal que
ni siquiera le presté atención.
John: ¡Eso es perfecto! Así Paul se
salvará
Andrea: Buen día John
John: Perdón por entrometerme, buen día
Andrea. ¡Muñequita!
Se dieron el beso de los “buenos días”
para después cada uno comenzar a arreglarse, para la audiencia.
Ya en el juzgado estaban los 3 Beatles
con Brian y George. De repente todo se tensó con la llegada de Linda y poco
después con la llegada de Andrea.
Fuiste a saludar a todos y te encontraste
con la sorpresa de que Ringo estaba allí, te dijo que María había ido por una
soda, entonces esperaste en las otras bancas justo con el resto.
Paul, Linda, Andrea, George, Brian y los
abogados de McCartney e Eastman pasaron al frente donde un juez los esperaba para
su anulación. Las preguntas empezaron, después el asunto se empezó a poner más
tenso, pues comenzaron las discusiones con los recién casados.
El juez decidió dar un descanso, en el
cual, linda decidió salir a tomar un poco de aire.
Paul: ¡Andrea!
Pero Andrea no le hizo caso y se acercó a
María y a ti. Tú, para ése entonces ya sabías que María estaba embarazada.
Comenzaron a platicar hasta que Andrea destapó su secreto de que estaba encinta
y lo que recordaba de Linda ésa noche en Las Vegas.
“Maldita perra, no dejaré que me
arruines, ni con ése testimonio ni con ése bastardo” –susurró una muy enojada
Linda.
El juez comenzó a llamar a todos y justo
cuando iban a entrar…
Linda: ¡Andrea!
Andrea: ¿Qué quieres?
Linda: Sólo quisiera hablar contigo de
algo rápidamente
María: Esto me huele raro
Tú: Hazle caso a María
Andrea: No se preocupen, adelántense, en
un momento las alcanzo
María: Pero-
Andrea: Pero nada, por favor, denme un
momento a solas con Linda
María y tú se fueron, por lo que Andrea
se acercó a Linda
Andrea: ¿Qué pasa linda? ¿Ahora de qué
quieres hablar?
Linda: Maldita bruja no dejaré que ganes
Andrea: ¿Qué?
Linda: Como escuchaste, ¡no dejaré que me
robes a mi Paul y mi dinero!
Andrea: ¡Pues lo siento porque Paul no es
tuyo! ¡Estamos enamorados y vamos a tener un hijo!
Los gritos comenzaron a escucharse dentro
de la sala, por lo que todos se acercaron silenciosamente para escuchar mejor.
Linda: ¡No lo creo estúpida! ¡ÉL SIEMPRE
SERÁ MÍO! – Y Linda aprovechó para tomarla por el brazo-
Andrea: ¡Suéltame! ¡Me lastimas!
Todos salieron al rescate de Andrea
George:¡DÉJALA!
Pero a medida que se iban acercando, Linda
se aproximaba a las escaleras.
Paul: ¡SUÉLTALA MALDITA!
Linda: ¿Estás seguro James?
Andrea estaba muy débil
Paul: ¡NOOOOO, LINDAAAAAAA!
Linda dejó caer a Andrea por las
escaleras, ante la mirada atónita de todos, mientras Andrea iba cayendo, una
parte de todos también, los policías rápido se abalanzaron sobre Linda, que
reía frenéticamente, mientras Andrea yacía en el piso, con un sangrado que
venía de su vestido.
¡Felíz navidad a todas! Pásenla bonito :3 y gracias a todas y cada una de las que pasa a leer ésta fic